Unión Europea respalda cese al fuego entre Israel y Siria. Llaman a salvaguardar la vida de civiles en la región
Unión Europea respalda cese al fuego entre Israel y Siria. Llaman a salvaguardar la vida de civiles en la región
Como ustedes saben, siempre hay tremendas tensiones en el Medio Oriente, donde se producen situaciones que involucran a Israel y a las naciones vecinas. En ese sentido, lanacion.com.ar informa lo siguiente:
“Unión Europea saluda alto el fuego entre Israel y Siria e insta a proteger a todos los civiles
La UE saludó el sábado un alto el fuego entre Siria e Israel mediado por Estados Unidos y afirmó que estaba “consternada” por la violencia que estalló en una región de mayoría drusa en el sur de Siria.
“Ahora es el momento del diálogo y de avanzar hacia una transición verdaderamente inclusiva. Las autoridades interinas de Siria, junto con las autoridades locales, tienen la responsabilidad de proteger a todos los sirios sin distinción”, dijo el servicio diplomático de la Unión Europea en un comunicado”. (1)
Bien, dejaremos la lectura de esta noticia hasta aquí.
Lo que está ocurriendo en Siria es que hay distintas clases de tensiones producto del cambio de gobierno, luego de que Bashar al-Assad abandonara el país y se refugiara en Rusia. En ese contexto, ascendió al poder un nuevo líder, un hombre que ha estado fuertemente vinculado al grupo terrorista ISIS.
Durante esta semana, Israel realizó un ataque militar importante contra Siria, destruyendo edificios gubernamentales. Israel declaró lo siguiente:
“Estamos aquí para proteger a los drusos, ya que existe una larga y arraigada alianza entre drusos e Israel”.
Se agrega que, en Israel, los drusos constituyen una comunidad de 150.000 personas, quienes incluso sirven regularmente en el ejército israelí. En Siria, por su parte, la comunidad drusa alcanza a cerca de 700.000 personas.
Dado que los drusos en Siria fueron atacados por otros grupos extremistas que aún operan en ese país, la situación se descontroló: hubo muertos, heridos, y el ejército sirio (o parte de las milicias que respaldan al nuevo líder) intervino para detener la crisis.
En ese contexto, Israel respondió mostrando fuerza: bombardeó zonas del gobierno sirio y declaró que tiene una alianza estratégica con el pueblo druso. Señaló que los protegerá, ya que sirven en su ejército, y que si no los cuidan o los atacan, Israel tomará represalias.
La situación comenzó a escalar rápidamente, lo que generó preocupación tanto en Estados Unidos como en la Unión Europea. Hubo conversaciones diplomáticas, y se logró un acuerdo temporal de paz.
Ustedes saben que en el Medio Oriente los acuerdos suelen ser temporales. Sin embargo, esta vez se logró detener una crisis crítica que ya estaba provocando matanzas en la región.
El pueblo druso es una comunidad étnica y religiosa con creencias propias. Hablan árabe, y su fe se considera una rama del islam chiita, aunque tienen su propia teología. Creen en un Dios único, no aceptan conversos, y su líder histórico más respetado es Jetró, el suegro de Moisés.
Como mencionamos, en Siria hay unas 700.000 personas de esta comunidad, lo que no es un número menor. En este escenario, y esta es la parte profética que queremos analizar, lo que sucedió es que Israel bombardeó edificios del gobierno sirio y realizó ataques sobre Damasco.
Esto nos hace pensar, amigos auditores, que las distintas situaciones que se dan en el terreno del Medio Oriente terminan reflejando lo que ya está escrito en la Palabra de Dios.
Recordemos que el libro de Isaías, capítulo 17, dice claramente que Damasco dejará de ser ciudad. Cito el versículo:
“1 Profecía sobre Damasco. He aquí que Damasco dejará de ser ciudad, y será montón de ruinas.“
Eso es lo que ya estamos viendo hoy en Damasco, la capital de Siria. Y el hecho de que continúen los ataques muestra que avanzamos hacia ese juicio anunciado.
Algunos han acusado a Israel, y particularmente al primer ministro Benjamín Netanyahu, de mantener el conflicto para evitar procesos judiciales en su contra. Esto genera una tensión interna importante, con renuncias en su gobierno y la posibilidad de que se convoquen nuevas elecciones.
Pero más allá de la política interna de Israel y los ataques en curso, como Iglesia del Señor Jesucristo debemos observar que, en lugar de avanzar hacia la paz en el Medio Oriente, continúan los bombardeos y la violencia.
Esto abre el escenario para que surja el Anticristo con una propuesta de paz y mediación. De alguna forma, logrará establecer una paz temporal en la región.
Durante esta semana, Israel atacó Damasco para proteger a la comunidad drusa, una población de 700.000 personas que vive en Siria, pero también en Israel, donde algunos son ciudadanos y sirven en el ejército.
Además, sigue la tensión con el Líbano, donde opera el grupo terrorista Hezbolá, y continúa la crisis en la Franja de Gaza, con rehenes aún en manos de Hamás. Ahora, se abre un nuevo frente: Siria, donde gobierna un líder fuertemente vinculado al grupo ISIS.
El Medio Oriente nos muestra, como Iglesia del Señor, que se avecinan grandes guerras proféticas. Veremos a los reyes del oriente reunirse en el valle de Armagedón. Esto recién comienza en términos del conflicto espiritual que se vive en la región.
Por un lado, las naciones serán guiadas por Satanás para destruir a Israel. Por otro, la nación de Israel será quebrantada, dando a luz un remanente que reconocerá a Jesucristo como su Mesías y Salvador.
Como Iglesia, observamos cada una de estas situaciones entendiendo que cada crisis es un paso más hacia el arrebatamiento y los días de tribulación, que preceden la segunda venida del Señor. Lo decimos cada semana: no sabemos cuánto tiempo falta para que Cristo regrese, pero las señales proféticas se aceleran. Debemos ser una Iglesia que entienda y discierna los tiempos.
Cada semana vemos señales en Europa, en la tecnología, en el Medio Oriente, en las naciones que rodean a Israel, y en el mundo entero. La maldad y el pecado avanzan velozmente, y pronto será manifestado el gobierno del Anticristo.
Hoy vemos a Israel atacando Siria, y a la vez un acuerdo de paz para proteger al pueblo druso. Pero todo sigue al borde del colapso. Solo el retorno glorioso del Señor Jesucristo traerá la verdadera y definitiva paz.
¡Preparémonos para la venida del Señor!
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