Persiguen y matan a judios. Se acerca la angustia de Jacob
Persiguen y matan a judios. Se acerca la angustia de Jacob
En esta ocasión traemos una noticia que, indiscutiblemente, causa tristeza. Se trata de un ataque terrorista ocurrido en la ciudad de Washington D. C., Estados Unidos, donde dos jóvenes funcionarios de la Embajada de Israel, que asistían a un evento en el Museo Judío, fueron brutalmente asesinados por un terrorista de origen hispano. En relación a este hecho, el sitio cristiano norteamericano Harbinger’s Daily informa:
“Terrorismo antisemita depravado: Dos diplomáticos israelíes fueron asesinados a tiros por un hombre propalestino en Washington, D.C.
Dos empleados de la embajada israelí fueron asesinados a tiros en un ataque antisemita en Washington, D.C., el miércoles por la noche, alrededor de las 21:00. Según un portavoz de la embajada, los diplomáticos recibieron disparos a quemarropa mientras asistían a un evento en el Museo Judío de la Capital.
El ministro israelí de Diáspora y Lucha contra el Antisemitismo, Amichai Chikli, confirmó en una publicación en X que una de las víctimas del ataque fue Yaron Lischinsky (28), quien trabajaba en el departamento político de la Embajada de Israel. Se confirmó que la segunda víctima era una joven llamada Sarah Milgrim.
“Yaron y Sarah eran nuestros amigos y colegas”, declaró la Embajada en un comunicado . “Estaban en la flor de la vida. Esta noche, un terrorista les disparó y les causó la muerte al salir de un evento en el Museo Judío Capital de Washington D. C. Todo el personal de la embajada está desconsolado y devastado por su asesinato. No hay palabras para expresar la profunda tristeza y el horror que sentimos ante esta devastadora pérdida. Acompañamos en el sentimiento a sus familias, y la embajada estará a su lado en estos momentos tan terribles”.” (1)
Esa es la noticia, estimados amigos auditores. Una noticia bastante fuerte.
El pasado miércoles, a mitad de semana, dos jóvenes funcionarios de la Embajada de Israel en Washington D. C., Yaron Lischinsky y Sarah Milgrim, salían del evento cuando un terrorista propalestino, de origen hispano, les disparó causándoles la muerte. Mientras era detenido, este hombre gritaba: “¡Liberen a Palestina! ¡Liberen a Palestina!”.
Esto, evidentemente, causó un gran impacto, pues fue un atentado antisemita cometido en la misma capital de Estados Unidos. Ha habido todo tipo de declaraciones e información. Y lo más tremendo es que, a medida que los datos emergen, se descubre que estos dos jóvenes eran judíos mesiánicos. Creían que Jesús es el Mesías judío, y que su regreso está muy cerca.
Tanto Yaron como Sarah eran creyentes cristianos. Aunque trabajaban como funcionarios judíos en la embajada de Israel, habían hecho de Jesús el Señor de sus vidas. Y lo más conmovedor, estimados auditores, es que eran novios y estaban próximos a casarse. Según la información disponible, Yaron incluso ya había comprado el anillo de compromiso, con la intención de entregárselo a Sarah una vez regresaran a Jerusalén para oficializar su compromiso y casarse.
Esta es la realidad. Esta es la situación. Nos muestra cómo aumenta el odio hacia la nación judía en el mundo entero. Recuerdo haber comentado esto con una persona no creyente que, sin reparo, me dijo: “Esto les pasa porque se lo merecen.” Es decir, hay un odio creciente a nivel mundial contra el pueblo judío y el Estado de Israel.
Es cierto que hay muchos aspectos que pueden analizarse sobre el conflicto en Medio Oriente y el problema palestino-israelí. Sin embargo, el hecho de que estos dos jóvenes, Yaron y Sarah, creyentes, hermanos nuestros en la fe, hayan sido asesinados brutalmente por un hombre que no tenía relación directa con dicho conflicto, nos revela el nivel de odio que se está gestando en el mundo.
Además, la prensa internacional cada vez más culpa a Israel de todos los males, y esto es parte del cumplimiento de la Palabra de Dios. La profecía bíblica se cumple ante nuestros ojos. El libro de Zacarías dice que todas las naciones del mundo se levantarán contra Jerusalén y ya está comenzando.
La muerte de estos dos jóvenes judíos mesiánicos, Yaron y Sarah, demuestra que el mundo odia al Estado judío, y que no vacilará en asesinar a cualquier judío que tenga cerca. Por ello, la Iglesia del Señor Jesucristo debe entender que el reloj de Dios, que es Israel, está avanzando hacia la hora cero. Todos estos eventos globales nos muestran que el eje profético se está centrando cada vez más en Jerusalén y en el pueblo judío. Se acercan los días de la tribulación; días en que el anticristo buscará controlar Jerusalén y se desarrollarán los eventos proféticos descritos en la Palabra de Dios.
La muerte sin sentido de estos dos jóvenes, Yaron y Sarah, ambos de aproximadamente 28 años, creyentes en Cristo, nos muestra que el mundo no quiere nada con Dios, ni con el pueblo judío. Y probablemente, pronto, vendrán también contra los cristianos. Vivimos una época en que la apostasía reina, donde se busca vivir sin verdad, sin barreras, y hacer todo lo que pasa por la mente del pecador. Esta es una gran señal profética para que sigamos orando por la redención del remanente judío que deberá recibir al Señor Jesucristo al final de los días de la tribulación. Estos dos jóvenes eran miembros del remanente judío que ya está siendo salvo, pues Dios está actuando para cumplir las promesas dadas a Abraham, a los profetas, y a través del Señor Jesucristo y los apóstoles. Vivimos tiempos proféticos, amigos auditores. Debemos orar con fuerza por la salvación del remanente judío, para que Cristo complete Su obra.
La Biblia afirma que mucha gente morirá, especialmente en Medio Oriente. No porque Dios lo quiera, sino porque es la consecuencia del pecado humano: del hombre que vive sin la ley de Dios. Y vemos cómo Satanás, el diablo, empuja a todas las naciones contra Israel. Debemos entender, como Iglesia, que el diablo quiere destruir a la nación de Israel para impedir que se cumplan las profecías del Antiguo Testamento, las cuales requieren un remanente. Sin embargo, mientras oramos por ese remanente, la palabra profética seguirá cumpliéndose. El arrebatamiento de la Iglesia del Señor está muy cerca. Israel se convertirá en el eje de los eventos de la tribulación. Por eso, debemos orar por ellos. Dios consuele a los padres y familias de Yaron y Sarah, dos jóvenes judíos vilmente asesinados por un terrorista que gritaba: “¡Liberen a Palestina!”. Pero la verdadera libertad solo vendrá con el retorno del Señor Jesucristo en poder y gloria.
Sabemos que hay mucho sufrimiento en Medio Oriente. Los terroristas de Hamás no quieren liberar a los cautivos que mantienen en las mazmorras de la Franja de Gaza. La guerra continúa, y el dolor también.
Por eso debemos clamar para que venga pronto el Reino de Dios, y se manifieste tanto en Medio Oriente como en todo el mundo. En medio de este dolor, oramos por la situación de Medio Oriente y por las familias de estos dos jóvenes asesinados.
Oración final:
Padre, en el nombre de Jesús, Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob; Dios de Elías, Isaías, Jeremías; Dios de Oseas, Zacarías y Malaquías; Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Mesías enviado; Dios de Pedro, Pablo, Mateo y Juan…
Padre, en el nombre de Jesús, oramos por la paz de Jerusalén y por la paz de Medio Oriente. En primer lugar, te pedimos por el corazón de las familias de estos dos jóvenes judíos mesiánicos, Yaron y Sarah. Bendícelos, dales paz, que pronto puedan participar de la resurrección.
Al mismo tiempo, Señor, oramos por quienes sufren en Israel y aún tienen a sus familiares detenidos en las mazmorras subterráneas de la Franja de Gaza. Oramos por el sufrimiento en Gaza. Oramos para que hagas justicia contra el grupo terrorista Hamás. Oramos para que detengas la violencia de Hezbolá.
Te pedimos misericordia por la nación de Irán y su odio contra Israel. Y de manera especial, te pedimos, Padre de la gloria, que salves al remanente judío profético que recibirá a Cristo en Su segunda venida, en gloria y majestad.
Padre celestial, lo pedimos en el nombre de Jesús, amén y amén.
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